Los frenos son un componente clave para la seguridad y el buen tacto durante la conducción. Sin embargo, en condiciones exigentes —como frenadas intensas y continuadas o altas temperaturas exteriores— pueden alcanzar valores térmicos superiores a los ideales, lo que provoca una pérdida de rendimiento y sensaciones en la frenada.
Con el Brake Cooler de Puig se consigue reducir la temperatura media de funcionamiento de las pinzas de freno en hasta 10 grados, favoreciendo tanto la eficacia como el tacto de frenada. Además, gracias al deflector inferior, se logra reducir significativamente las turbulencias generadas en la rueda delantera, mejorando así el comportamiento aerodinámico del conjunto.
El conjunto está formado por cuatro piezas: dos conductos de refrigeración de pinzas y dos deflectores o “wheel covers”.
Todas han sido diseñadas y fabricadas en Barcelona con tecnologías avanzadas de moldeo de plásticos técnicos.
Los soportes están fabricados en acero inoxidable, un material resistente y ligero, con un acabado en negro texturizado discreto, que se integra perfectamente con la estética general de la moto.
El montaje es sencillo y puede realizarse en pocos minutos siguiendo las instrucciones paso a paso que se incluyen en papel o están disponibles online.
Es importante aplicar el par de apriete correcto en los tornillos, ya que se trata de una zona técnica delicada.
Se recomienda revisar previamente las advertencias y recomendaciones incluidas en la documentación.
El Brake Cooler actúa como un canal de aire que capta, compacta y dirige el flujo directamente hacia las pinzas de freno, evitando su sobrecalentamiento y asegurando un rendimiento óptimo.
El deflector de rueda, por su parte, reduce las turbulencias generadas en la parte delantera y compensa la resistencia aerodinámica añadida por el conducto de refrigeración.
En pruebas realizadas en circuito se ha verificado una reducción media de temperatura de 10 grados en las pinzas de freno.Mejora las prestaciones en frenada con el refrigerador Brake Cooler de Puig.
El enfriador de freno se ha diseñado teniendo en cuenta las altas prestaciones que ofrece la conducción deportiva, en la que se pone al límite su efectivo conjunto de frenos, con frenadas fuertes y continuas como las del circuito, y aún más en los meses calurosos. Lo que puede provocar un sobrecalentamiento que reduce las prestaciones y sensaciones en la frenada.
Realizado y fabricado en Barcelona con las últimas tecnologías en el moldeo de plásticos, está compuesto por dos tapas de plástico ABS de alta gama, una para cada conjunto de disco y pinza, creando un canal que capta el aire y lo compacta y acelera para dirigirlo de manera directa sobre las pastillas y el disco de freno, consiguiendo rebajar la temperatura de los frenos en diez grados de media como se ha comprobado en pruebas en circuito, lo que permite que no se sobrecalienten y trabajen de manera óptima.
Su estudiado diseño, además de aportar una estética más deportiva y personalizada, elimina turbulencias en la rueda delantera al crear una tapa lenticular parcial que favorece la aerodinámica de la moto, sobre todo a altas velocidades. Incluye soportes de resistente y ligero aluminio acabados en un discreto color negro texturizado.
El montaje es rápido y sencillo, se puede hacer sin conocimientos de mecánica siguiendo las instrucciones paso a paso que se suministran en papel y se pueden consultar online. Hay que prestar atención en aplicar el par indicado a los tornillos para asegurar que no se aflojen.
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